La fluorosis dental es una condición que afecta el esmalte dental debido a la exposición excesiva al flúor durante el desarrollo de los dientes. Esto puede ocurrir por el consumo de agua con altos niveles de flúor o el uso excesivo de pastas dentales fluoradas. El esmalte dental se vuelve moteado o manchado, y en casos graves, puede debilitarse.
Etiología de la fluorosis Dental
En la actualidad se sabe que la ingesta de agua que contiene fluoruro durante la época de formación dental, puede dar origen a un esmalte moteado. La intensidad de dicho moteado o veteado aumenta según la cantidad de Fluoruro que contenga el agua, por lo que en términos generales, el moteado químico es escaso cuando la concentración de Fluoruro es inferior de 0,9 a 1 parte por millón de partes de agua, pero su severidad aumenta en forma graduada a medida que es mayor la concentración de Fluoruro.
Patogénica de la Fluorosis
Su patogénia no está totalmente explicada, pero se admite que está Hipoplasia se debe a una alteración que sufren los Ameloblastos durante la EtapaFormativa del desarrollo dental. La naturaleza exacta de la lesión se desconoce, pero en estudios histológicos se observa que hay manifestación de daño celular, dónde probablemente el producto celular, la matriz del esmalte está defectuosa o deficiente, es por eso que una vez que comience el proceso carioso dichos dientes se destruyen más rápido.
También se ha demostrado que a mayores niveles de Fluoruros se obstruye el proceso de calcificación de la matriz.
Los estudios epidemiológicos han señalado, que no todos los niños nacen y se crian en un área de Fluorosis Endémica tienen el mismo grado de moteado, no obstante, que todos ingieran agua del mismo abastecimiento; aún más, pocas personas pueden mostrar un moteado moderado incluso cuando se exponen a una concentración muy baja de Fluoruro. Estos datos pueden relacionarse con la variación individual con respeto al consumo total de agua y de esta manera a la ingesta total de Fluoruro.
Aspectos Clínicos de la Fluorosis Dental
Hay una amplia variación en el aspecto clínico de los dientes afectados por el moteado o fluorosis, y las variaciones están con frecuencia relacionadas con las diferentes concentraciones de Fluoruros; en consecuencia el defecto aumenta, a medida que aumenta ls concentración de Flúor. Caracterizando se en rasgos generales, por presentar manchas blancas horizontales al momento de la erupción, pero con el pasar el tiempo adquieren un tono parduzco, que es típico del Esmalte Moteado.
Los dientes afectados son aquellos que durante su período de formación estuvieron sometidos a concentracin muy alta de Fluoruros.
Por lo tantos los defectos del esmalte son invariables bilaterales y afectan a dientes similares en los cuatro cuadrantes. Es importante señalar, que si todos los dientes presentes en la boca estuvieron sometidos durante su período de formación de Flúor, todos ellos presentarán un moteado característico.
Esto se puede observar en comunidades en dónde el agua potable o de chorro contienen una concentración de flúor mayor a la dosis permisible (1 ppm), presentando una dentadura con intenso moteado, siendo dichos dientes menos susceptibles a las caries pero se destruyen aún mucho más rápido una vez iniciado el proceso carioso.
La Fluorosis no está asociada con dolor, pero los defectos clínicos suelen ser permanentes y cuando son graves pueden desfigurar, y más aún, en los casos más graves pueden estar acompañados de Periodontopatías y Afecciones de la Dentina.
Esto se explica por las fisuras y los surcos que se forman en la superficie del esmalte, que son sitios retenedores de sustancias cariogénicas.
Shafer considera de dependiendo del nivel de Fluoruro en el agua, el aspecto de los dientes moteado puede variar:
A- Cambios caracterizados por manchas o vetas, de color blanco a nivel del esmalte.
B- Cambios moderados, manifestados por áreas opacas blancas, que afectan más el area de las superficie dental.
C- Cambios moderados e intensos, que muestran formación de fosetas y coloración parda de la superficie.
D- Apariencia corroída, que presenta un intenso desgaste hasta poder llegar a una deformación de la corona.
Conclusiones de los trabajos realizados por Shafer afirman, que los dientes afectados pueden mostrar tendencia a desgastarse, e incluso a facturar el esmalte.
Estudios iniciales han demostrado que estos dientes presentan problemas para retener las restauraciones.
Una síntesis de los trabajos experimentales de Zagerelli clasifica a la Fluorosis en tres tipos, según su severidad:
1. Fluorosis Leve: Se caracteriza por la presencia de manchas o puntos blancos o grises, múltiples y dispersos de pequeño tamaño y planos, que se encuentran sobre la superficie del esmalte.
2. Fluorosis Moderada: La totalidad o la mayor parte del esmalte presenta un aspecto blanco como el yeso, delustrado o mate. Corrosión diseminada color pardo o marrón o canela.
3. Fluorosis Grave: El diente está deformado por la hipoplasia y la hipocalcificación grave. Desfigurado en forma y tamaño, con coronas anormales, corrosión marcada y coloración aumentada.
Los estudios realizados por Dean demostró la existencia de una asociación cuantitativa entre la gravedad de los defectos del esmalte y la concentración en Fluoruro en el suministro del agua. Estableció la clasificación de la Fluorosia basada en la gravedad, naciendo así en Índice de Dean.
0 = es Normal.
0,5 = Defecto Discutible: El esmalte presenta una ligera anomalía de su transparencia normal.
1 = Defecto muy Ligero.
2 = Defecto Ligero: Se observan pequeñas zonas planas, opacas de blanco papel y dispersa sobre menos del 50% del diente.
3 = Defectos Moderados: Está afectada toda la superficie del esmalte, con desgaste marcado en los dientes, con frecuencia acompañada de manchas pardas.
4 = Defecto Grave: Está afectada toda la superficie del diente con una hipoplasia marcada, deformidad anatómica, discretos hoyos y decoloración extensa.
Distribución Geográfica:
En numerosas partes del mundo se ha descrito la presencia del esmalte moteado, incluyendo Europa, África, Asia y Estados Unidos, en este último las zonas afectadas son al oeste del Río Mississipi (Texas- Illinois).
En Venezuela se reportan áreas de Fluorosis natural como en el Estado Zulia, al sur del Lago de Maracaibo, en el estado Aragua y en el Estado Carabobo.
El Estado Carabobo se encuentra presenta en las zonas de Mariara, San Joaquín y Guacara, la cual están surtidas por los acueductos alimentados por el Río Ereigüe, dónde el Flúor está ampliamente distribuido entre sus aguas y sus rocas en dosis comprendidas entre 2 o 3 ppm. Estando estás zonas a su vez, surtidas por el Embalse de Cachince, que no presenta ningún tipo de Fluoración.
En la zona del Cambur y Trincheras, en el Estado Carabobo, son zonas que también presentan aguas ricas en Flúor.
Tratamientos
Algunos autores afirman que se pueden realizar un blanqueamiento con un agente como el Peróxido de Hidrógeno, (agua oxigenada), para eliminar el desagradable color pardo que adquiere el esmalte moteado al pasar el tiempo.
Este procedimiento es estético, práctico y eficaz, que hay que realizarlo periódicamente.
Otros autores afirman que el defecto es grave, debe emplearse restauraciones de resinas durante la niñez; y fabricarse recubrimientos fijos protésicos totales, después que la camara pulpar se haya retraído.
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